Los Miserables
#Transformando
Por: Abelardo Pérez Estrada Empresario, Analista, Expresidente CANACINTRA
Es una novela del escritor francés Victor Hugo, considerada como una de las principales obras del siglo 18.
Analiza el bien, el mal, la ética, justicia y la fe, en el contexto de la sociedad francesa, el comportamiento humano frente a la adversidad, narrada en la historia de un expresidiario que desea reformarse.
Desde esa época, incluso antes, la naturaleza humana juega un papel primordial en la influencia que tiene sobre los gobiernos y gobernados, uno de los principales retos en la actualidad, es la falta de integridad e inteligencia emocional de la gente que llega a un cargo de poder.
Vivimos, con la gran tentación de utilizar el poder y la información para el bien propio, antes que el común y el cobijo de la impunidad, casi da la seguridad de salir ileso en la mayoría de los casos.
En la actualidad, podemos ver ejemplos de esa miseria, en este proceso de campañas políticas, donde importa más, mostrar la miseria de los candidatos, mostrando la miseria de sus opositores.
Esa miseria, que arrastra a los ciudadanos y los induce a tomar bandos, los cuales, en la mayoría de los casos, da como resultado el distanciamiento, por la poca tolerancia y pobre argumentación, de acciones de gobierno que no nos constan al 100%.
Pero calificaría de las peores miserias, aquellas que, con dolo, se aprovechan para inducir a los ciudadanos.
Como ejemplo actual (aclaro que no es la primera vez que sucede, pasaba con los gobiernos anteriores, tal cual si fuese un virus llamado poder)
Actualmente, desde el presidente López Obrador, hasta los servidores de la nación y brigadistas de morena, pasando por Mario Delgado, Claudia Sheinbaum, saben que los programas sociales están a nivel constitucional y no se podrán quitar solo con la voluntad presidencial, sino con la decisión de la mayoría del poder legislativo, del cual deberíamos esperar su autonomía.
Con lo anterior, como nos explicaríamos, que un eje de la campaña en favor de Claudia, es amenazando a adultos mayores, jóvenes, mujeres, beneficiarios de los programas sociales, “con la mentira de que si votan por PRI-PAN-PRD, les quitarán los programas sociales, aun sabiendo que esto no es posible sin el paso por el congreso”.
Una de las definiciones de “miserable”, es la persona que obra de un modo negativo, malvado, abusivo, sin consideración o respeto y perjudica a los demás para su propio beneficio.
Sin esta definición, no entendería este actuar, para beneficiar en la campaña, a la candidata oficialista.
Otro ejemplo, lo encontramos, solo analizando el poco respeto a la inteligencia de los ciudadanos, con campañas cargadas de propuestas que no verán la luz o de candidatos que les iría mejor haciendo standup.
Seguro esta columna hará enojar, a algunos miserables.
POSDATA:
“Miserable el trato y cargada en contra de María Amparo Casar, cuyo pecado fue acatar el acto de autoridad que hace 20 años dio la procuraduría de la ciudad de México en los tiempos de Bernardo Bátiz y su jefe Andrés Manuel López Obrador”
¡Es tiempo de los ciudadanos!!! No de miserables¡